Esto que escribo está dedicado a ti, la persona a quien
le fallé. Sí, porque tristemente te fallé, y creo que lo peor de todo es que al
fallarte, fallé a mí mismo, por eso pretendo explicarte qué fue lo que sucedió
entre nosotros. Sé que he cometido muchos errores y sé también que no puedo dar
marcha atrás ni deshacer los pasos que di.
Aunque me cueste dolor, comprendo que lo nuestro ha
terminado y ya no hay nada que pueda remediarlo. Pero debo confesar que con
gusto infinito lo viviría nuevamente, porque sé que cada instante que he pasado
a tu lado, cada aprendizaje, cada alegría, valieron la pena, sin duda. Sin
embargo hoy, si bien cada quién debe seguir su camino, me quedo con el placer
de haberte tenido en mi vida.
Después de haber pasado tanto tiempo viviendo
juntos, y de todas las lindas experiencias que pude vivir a tu lado, nunca tuve
el empuje para decirte lo bien que me hacía tu presencia. Siempre me costó
reconocer mis errores o, como tú solías decir, nunca me hice una autocrítica. Por
eso que ahora, que ya llevamos un cierto tiempo separados, carente de tus besos
y tus cariños, quiero que sepas que por fin lo estoy haciendo, quizás demasiado
tarde, es verdad, pero mismo así estoy tratando de corregir mis errores y ser
una mejor persona.
Tarde quizás, he descubierto que esa hermosa
relación nuestra es algo que atesoraré por siempre. Cada cosa que compartimos,
cada una de las caricia, cada beso, cada abrazo, nuestras salidas, nuestras
idas a los lugares que con el tiempo se tornaron favoritos, han sido en sí las
cosas que lamentablemente no supe sostener.
Con todo, luego de tanto desconsuelo entre nosotros,
acredité que era eminente tu partida, y por eso no hice nada por retenerte a mi
lado. Te dejé ir así nomás, no tuve el valor de luchar por lo nuestro y eso es
algo de lo que seguramente me arrepentiré por siempre. Cometí muchos errores, y
ahora resulta tarde para repararlos.
Desafortunadamente, el daño ya está hecho, las
palabras que te hirieron han de continuar dando vueltas en tu cabeza y siempre
ha de haber alguien que se encargará de hablarte mal de mí y magnificar las
cosas, pero no te lo reprocho en lo más mínimo, así como supongo que has de
pensar que soy lo peor.
Sé que tú me amaste también, me lo decían tus ojos,
tu manera de tratarme, tus besos cariñosos, pero no podemos dejar de reconocer
que los errores que ambos cometimos fueron más grandes que las virtudes de
nuestra relación, y eso acabó por terminarlo todo. Por lo que aquí estoy yo,
aceptando la parte de mi culpa.
Te amé intensamente como a nadie he amado, y creo
adivinar que como a nadie volveré a amar nuevamente. Tú has sido mi chica
especial, la más linda, la más tierna, la persona a quien más admiro en este
mundo. Me encantaban tus detalles, no porque me dieras cosas, sino porque eran
la prueba de que me apreciabas bastante. Cuando te conocí, supe que serías especial
en mi vida, y hasta imaginé como sería el futuro contigo: hijos, casa, perro…
Por eso, cuando tú te fuiste, mis sueños se
destrozaron en añicos y me quedé vacío. Mi vida de pronto ya no tuvo sentido.
Nenhum comentário:
Postar um comentário