Ya no
tengo dudas, mi amigo. Especialmente porque ese acúmulo de situaciones
esdrújulas que vienen ocurriendo cada vez con más frecuencia en este orbe, me
llevan a hacer creer que el día que Albert Einstein tanto temía, finalmente
llegó.
Para que
cualquier carente de dos dedos de frente y un cerebro pueda comprender mejor lo
que mencionaré a seguir, basta con que el husmeador leyente tome al pie de la
letra la declaración formulada en algún momento por este gran físico alemán:
“Tengo miedo del día en que la tecnología vaya sobrepasar a interacción humana…
Entonces tendremos que el mundo será una generación de idiotas”.
Por otro lado,
a causa de la manifiesta diferencia de conceptos o de la distinta naturaleza de
los hechos que ocurren, no se puede aspirar siquiera a una mera comparación
preliminar de lo que alguien pretende comunicar con sus fotitos en las redes
sociales. En cierto modo menos mal que así es, porque, condición indispensable
para pasar al siguiente grado de entendimiento, tendría que ser preguntado qué
es eso del diablo, figura, entidad o personaje, como se supone, presente en el
mundo espiritual desde el principio de los tiempos. Y cualquiera puede imaginar
que haciéndose una pregunta de éstas, nada más comenzar y la discusión no
tendría fin.
Por tanto,
vaticinando lo que dijo la gallina, mejor que vaya directo al grano y me deje
de filosofar augurios perniciosos para la salud humana. Así pues, el asunto es
que el cosmopolita norteamericano David Strohm, de 27 años, terminó por sucumbir
electrocutado al tocar un cable de electricidad de un poste en cuanto buscaba subir
algunas fotos a internet de una puesta de sol, momento en que él se encontraba en
la cúspide de un árbol.
Tan apenado
accidente aconteció el último día 8 del corriente mes mientras David estaba en
el jardín de la casa de sus padres, en la ciudad californiana de Tustin, según las
informaciones del sitio de noticias norteamericano “Gawker” y del sitio de
la radio “CBS”.
Todos
suponen que Strohm se subió al árbol para lograr captar los mejores ángulos de una
idílica puesta de sol durante la linda tarde de sábado. No obstante, poco tiempo
después, la familia y los amigos dieron por su falta.
Sin
embargo, el cuerpo de David fue encontrado recién el domingo, todavía en el tope
del árbol. Conforme lo declarado por Steve Concialdi, el jefe de los bomberos del
condado de Orange, el descuidado joven habría terminado por tocar un cable de energía
de manera accidental luego después de postar las fotos en Facebook.
El mismo Concialdi
agregó que los técnicos de su grupo aun no consiguieron descubrir cómo fue que
el imprevisor muchacho entró en contacto con los cables de la energía eléctrica,
y llegó a declarar al periodista del diario “Orange County Register”, una
frase de alerta: “Permanezcan lejos de la electricidad. Eso es algo muy peligroso”…
Excluyéndose, obvio, a los que aguardan en la fila de la silla eléctrica.
Pero a
pesar de ya ser un individuo con edad para estar casado y con hijos, David vivía
con su madre y el padrastro, y solamente pudo der encontrado después que los
familiares percibieron su telefonito celular abandonado en el pasto debajo del
árbol.
Observando con atención lo ocurrido, opino que es
posible que alguna vez aprendamos a saber que todo cambia, todo termina y
vuelve a empezar a través de la tecnología, y con ella nunca está dicha la
última palabra, porque el éxito y el fracaso son hermanos malvados que se
alternan en la caminata de la vida… Así que mejor que cuidar del telefonito,
sería cuidar de la flauta, porque por lo visto la serenata es larga… ¡Espasmódico!
(*) Dentro
de la misma línea y condición de este Blog, dese una vueltita por “Infraganti!!!
Imágenes sin retoque”, un blog que contiene apenas instantáneas del cotidiano.
Disfrútelo visitando http://guillermobasanez.blogspot.com.br/ y pase por mis libros en el sitio: www.clubedeautores.com.br/carlosdelfante ...
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