quarta-feira, 18 de novembro de 2015

La Mortal Motivación Nocturna de Viejos


Diga la verdad, ¿cuánto vale la noche que usted siempre soñó? Para el ex peluquero Ray Boddington, de 74 años, que vive en Inglaterra, de acuerdo a su razonamiento, dependiendo de la motivación vale la pena correr un alto riesgo. Y fue exactamente lo que experimentó. Inconcusamente antes de saber que el final de la historia sería bien diferente a la de sus sueños…

Un sinnúmero de personas no creen que existan fuertes motivaciones que los lleven a desear alcanzar sus sueños. Evidente que existen muchas variables en este tema, pero en ocasiones el problema de la muchedumbre no es el enfoque, ni la claridad en lo que quieren, ni siquiera la fuerza de voluntad o la capacidad para actuar y lograr lo que desean… ¿Sabe por qué?

Dicen que a veces el problema no radica en encontrar una buena motivación para triunfar, y sí descubrir que motivación nos pueda permitir soñar en grande y luchar por nuestros sueños hasta alcanzarlos. Por tanto, la motivación es algo muy importante en el camino al éxito, y sin duda alguna forma parte de aquella caja de herramientas que podemos usar para construir un mejor futuro, ladrillo a ladrillo… O, en todo caso, usar la caja de remedios, como lo hizo Ray.

Si un individuo no está motivado camino a sus metas, alcanzar la cima -o ponerla para cima, como fue el caso de Ray- será un proceso bastante complejo, arduo y agotador para cualquiera. Pero si cuenta con unos buenos conceptos en su mente que le permitan saber que hay verdaderas razones para triunfar, entonces su mente será su aliada.

Entrando de vez en la motivada historia de Ray, resulta que este añoso británico consiguió, después de años de sueños lúdicos, un encuentro con una mujer casi 50 años más joven que él. Entusiasmado con la noche agitada que tendría por delante, Ray resolvió tomar no apenas uno, sino dos comprimidos de Viagra, el milagroso remedio que sirve para combatir la disfunción eréctil de los desahuciados miembros del club del clan.

Con todo, lo que él no imaginaba, era que el efecto de las pastillitas resultaría mucho peor de lo que él suponía. Sin necesidad de tener que narrar lo que ocurrió esa noche en el cuarto y sin luz, lo que se sabe es que al día siguiente de la “noche de sus sueños”, Ray despertó con fuertes palpitaciones cardíacas y tuvo que ser atendido con urgencia por los socorristas de una ambulancia.

Luego de cara los médicos notaron una elevación absurda de la presión del anciano -repito: elevación sólo de la presión arterial-, seguida de una alteración significativa en los batimientos cardíacos del soñador peluquero. Una vez medicado, Ray mejoró estando aún dentro del vehículo de emergencia y no necesitó ser conducido a un hospital.

Los médicos que estaban en la ambulancia, no obstante conteniendo la risa, alertaron a Ray sobre su suerte… Y no la de su decaído “birgulino”.

Es que si el soñador anciano hubiese sido atendido algunos minutos después, podría no haber resistido a las alteraciones de su frecuencia cardíaca y podría morirse allí mismo por cuenta de los Viagras que había tomado.

Consciente de la suerte que tuvo, este ex peluquero resolvió ahora usar su imagen para concientizar a las personas sobre los potenciales peligros del uso indebido del Viagra. Como en su juventud también fue músico, Ray ha participado del programa televisivo “The X Factor”, que busca talentos locales en la televisión, lo que facilita su acceso a las personas que deben ser alertadas sobre esas locuras y motivaciones cuando el cuero ya no aguanta.

En fin, debemos todos reconocer que filosofías vanas no remiendan zapatos, entonces, lo que le resta a todos los ya idos en años, es que frente la falta de respuesta a esa fuerza de voluntad que uno sueña, lo que tendría que hacer es meter los pechos del pie en la carretera para que sus quimeras puedan ser logradas de manera simple, surreal e indolora… ¡Fatal!

(*) Libros y e-book disponibles en: Livraria Saraiva: www.saraiva.com.br; Livraria Siciliano: http://www.siciliano.com.br; www.clubedeautores.com.br/carlosdelfante; y en: Plataforma editorial Bubok: www.bubok.es/

Nenhum comentário:

Postar um comentário